¿Crees que tu relación con la comida sería mejor si te lo hubieran enseñado desde pequeño? ¡Los buenos hábitos comienzan en la infancia!
Si tienes hijos, seguramente eres consiente de lo importante que es inculcarles buenos hábitos de alimentación. Y es que se ha observado que usar frases como “dos cucharadas más y te dejo ir a jugar” o “Si no te acabas las verduras no hay postre”, estrategias sólo provocan en los niños el desarrollo de una asociación negativa con los alimentos a los que son forzados a comer.
Pero la verdad es que los buenos hábitos son importantísimos para los niños, pues los definen desde pequeños e influyen en lo que harán a lo largo de toda su vida. Es por esto que hoy en Nutrilibrex queremos compartirte estos sencillos consejos para comenzar a mejorar la manera en que tu pequeño come.
- Ofrece variedad
Los niños deben comer alimentos variados, apetitosos y si posible que tengan una presentación sencilla y despierte su interés y ganas de comer. Cuando se presente un alimento nuevo a los niños, es una buena ocasión para decorar el plato de la comida. Así ellos se mostrarán más interesados en probarlo.
- Elige aperitivos saludables.
Ofrecer aperitivos sanos para nuestros hijos como frutas o bocadillos y alejarse de las papas de bolsa y panadería llena de azúcar, contribuirá a que nuestros hijos crezcan más sanos y cultivemos en ellos hábitos alimenticios saludables.
- A beber agua
Los médicos y especialistas recomiendan a los adultos beber entre 2 a 3 litros de agua al día. Sin embargo, para los niños la cantidad varía según diferentes factores como la edad, la altura, la actividad del niño, clima, etc. Aproximadamente los niños de unos 4 a 8 años deben beber al menos 1,5 litros al día y conforme son mayores ir incrementando esta dosis hasta los 3 litros.
- Enséñales a cocinar
Enseña a tus hijos a cocinar, diviértete con ellos cocinando juntos. Aprender a cocinar y disfrutar en la cocina es un hábito buenísimo para que de mayores eviten comidas rápidas y precocinadas.
- Coman en familia
Comer en familia es un hábito alimenticio muy bueno que contribuye a disfrutar con la comida y hacer de ella un momento placentero. Además, ayuda a que evitemos comer cualquier cosa rápido y ya. A todos nos da más pereza cocinar solo para nosotros. En cambio, si tenemos que cocinar para la familia, los platos que elaboramos son más sanos y de mejor calidad.
Recuerda que una buena alimentación, hará que tu pequeño reciba todas las vitaminas que necesita para el buen funcionamiento del organismo. Estas son de suma importancia sobre todo durante el crecimiento a lo largo de la infancia, ya que se necesitan miles de reacciones químicas para que el desarrollo celular de los niños se realice con normalidad.